Un grupo de personas se arremolina junto al guía. Es de noche. A primera vista no parece el mejor momento para visitar el casco histórico de la ciudad, pero las apariencias engañan. Y es que la oscuridad, apenas rasgada por la tenue luz de las farolas, ofrece el marco ideal para estremecerse escuchando historias luctuosas y pasajes de leyenda.
La escena se repite con éxito en varias ciudades españolas. Toledo, León o Vitoria son algunas de las urbes que pueden redescubrirse con las tradiciones y leyendas como compañeras de viaje.
“La gente huye de la típica explicación monumental e histórica. Busca algo de historia, pero contada de otra forma”, dice Pepe García Cano, documentalista histórico e informador cultural de Rutas de Toledo, una de las empresas que ofrece estos itinerarios por la ciudad del Tajo. Él y su equipo tratan de acercar, desde la heterodoxia, algunos de los aspectos más insólitos de la ciudad. “No lo hacemos como si estuviésemos soltando la clase magistral, sino de una forma distendida, graciosa y entretenida”, argumenta.
El equipo con el que trabaja García Cano fue pionero en organizar este tipo de rutas. Hace más de diez años especialistas como Luis Rodríguez Bausá o Javier Mateo decidieron llevar a la calle sus conocimientos sobre Toledo y su historia, intentando conjugar amenidad y seriedad.
No son los únicos toledanos que se dedican a ello. Y es que en la laberíntica ciudad manchega cada rincón parece esconder una historia. Patrimonio material e inmaterial se dan la mano allí con naturalidad.
Gonzalo Rodríguez García, de Paseos Toledo Mágico, es otro veterano de la divulgación del Toledo más oscuro. “Los habitantes del pasado eran personas con creencias mágicas y religiosas”, explica. “Por eso a veces la mejor manera de entender el pasado es comprender las creencias de esas gentes”.
Rodríguez García cree que escarbando alrededor de los mitos y leyendas puede encontrarse un acontecimiento histórico. “Aunque a veces ese acontecimiento puede ser extraordinario”, matiza. Tan insólito quizás como la mítica mesa del rey Salomón, cuyo rastro histórico y legendario siguieron el pasado julio a través de toda la provincia.
“Son los propios cronistas musulmanes los que nos dan noticia de cómo al llegar a Toledo creen encontrar la fabulosa mesa mágica del rey sabio de los judíos”, señala. “Tenemos referencias históricas, a través del Archivo de la Nobleza de la ciudad, de que cuando llegaron los godos para fundar el reino visigodo de Toledo, entre los numerosos tesoros que traen de sus saqueos y sus guerras se encuentra también la mesa de Salomon”.
La experiencia acumulada en Toledo les ha animado a dar el paso hacia otros lugares de la península. Así, en colaboración con el periodista y divulgador Jesús Callejo, han creado la redRutas Iberia Mágica, con destinos como el Cañón de Río Lobos, El Escorial, Barcelona, Sevilla y Málaga.
El primer asesino en serie
León es otra de las ciudades a las que el visitante puede acercarse desde otro punto de vista. La ruta León Insólito, ideada por el escritor Javier Tomé a partir de un trabajo de investigación realizado durante varios años, ofrece una alternativa a los recorridos tradicionales.
Tomé coincide con la idea defendida por sus colegas toledanos para explicar el éxito de este tipo de acercamientos turísticos. “La gente se siente más inclinada a conocer y disfrutar de una ciudad en base a sus leyendas, anécdotas y pequeñas historias, más allá de las explicaciones académicas de rigor”, defiende. La historiadora del arte y doctora en Patrimonio Ana Villanueba es la encargada de explicar a los visitantes los aspectos más insólitos de la ciudad. Este año, además, han ampliado la iniciativa original con el recorrido Catedral Insólita, utilizando la misma filosofía de trabajo para mostrar la cara menos conocida del templo leonés.
El veterano investigador Enrique Echazarra es el encargado de ofrecer una experiencia de este tipo a quienes se acercan a descubrir el lado menos conocido de Vitoria. La empresa Guías Artea le propuso documentar un recorrido histórico por el Casco Viejo de la capital alavesa, con misterios, leyendas e historias de crónica negra como eje principal de la experiencia.
Todas las historias generan gran interés, según cuenta Echazarra, pero sin duda uno de los platos fuertes es el Convento de San Francisco, con el relato de “su derribo y los supuestos hechos extraños en el actual edificio de Hacienda que ocupa su lugar”, destaca.
La historia del Sacamantecas conmueve especialmente a quienes se acercan al recorrido y conocen por primera vez las andanzas de Juan Díaz de Garayo, “un asesino en serie anterior a Jack el Destripador que tuvo a la provincia de Álava en vilo durante casi una década”.
Quienes preparan este tipo de rutas se basan en una amplia documentación histórica y en relatos de la tradición oral para sacar a la luz historias perdidas en el pasado. Y este trabajo de documentación, en ocasiones, ha dado pie a plasmar negro sobre blanco algunas de las historias y leyendas rescatadas del olvido. Un buen ejemplo de ello es el libro León insólito, cocinado en gran parte en la hemeroteca del Diario de León y en el que Javier Tomé, Pepe Muñiz y Ana Villanueva han recopilado algunos pasajes memorables de la biografía de la ciudad.
También Echazarra, autor de “Crónicas de Brujería”, prepara un trabajo sobre leyendas y enclaves insólitos del País Vasco. En Toledo se ha convertido en un clásico el libro “La vuelta a Toledo en 80 leyendas” de Luis Rodríguez y de Javier Mateo. Los responsables de Rutas Iberia Mágica, por su parte, preparan material complementario a sus rutas, aunque en este caso se trata de una novedosa aplicación para smartphone con audioguía geolocalizada. Que nadie se alarme, pues, si escucha algún susurro apagado al transitar por el Callejón de los muertos de Toledo. Puede ser un eco del pasado, cierto, pero también un android desbocado. Avisados quedan.